Envío de bienes de difuntos a España. Entrega de bienes de difuntos a herederos.

Pedro de Peralta y Juan Bautista informan al Rey Felipe que Pedro de Ayllón falleció en la Provincia de Cartagena, y que “al tiempo de su fin y muerte dejó mucha cantidad de bienes, oro y plata, joyas, esclavos y otras cosas, así en poder de Nuño de Castro como de otras personas”, lo cual les pertenecía por ser sus hermanos, y le suplican que para poderlos heredar, ordene recuperar los bienes de quienes los tengan, y los envíen a la Casa de la Contratación de Sevilla (I. 413). El Rey ordena al Gobernador y demás Justicias de aquella provincia, que averiguen “qué bienes, oro y plata, joyas y otras cosas quedaron en esa tierra así en poder del dicho Nuño de Castro como de otras personas”, los recuperen de esas personas y con su testamento y otras escrituras, los envíen a la Casa de la Contratación de las Indias, para que allí se entreguen a quienes correspondan, y si alguien reclama derechos sobre ellos, hagan sobre ello justicia (I. 414).