Quejas contra el Obispo de Cartagena por reservar casos sobre cómo los vecinos de Cartagena se deben confesar.

Sebastián Rodríguez, en nombre del Cabildo de Cartagena, envía quejas al Rey Felipe contra el Obispo de la Provincia de Cartagena, quien “reservó en sí muchos casos de cómo los vecinos de la dicha ciudad se habían de confesar, en gran perjuicio de ellos, los cuales le hicieron cierto requerimiento y dijeron muchas causas y razones contra ello porque no eran conforme a razón y justicia”, según consta por las copias de los casos que envía.
Suplica al Rey que ordene se revisen y estudien estos documentos, para que se provea lo que mejor “convenga al servicio de Dios y de vuestra majestad y al bien y conservación de la dicha ciudad y vecinos de ella” y que no permita que los vecinos de Cartagena “sean vejados ni molestados por el dicho Obispo en semejantes cosas”, en lo cual recibirán merced (I. 1).